El Partido Socialista Obrero Español, fundado en 1879 por Pablo Iglesias, constituye la formación política más antigua de España y ha protagonizado los principales períodos de modernización democrática del país
Tras la recuperación de la democracia, el PSOE alcanzó el poder en 1982 con Felipe González, quien gobernaría durante catorce años consecutivos en una etapa marcada por la consolidación del Estado de bienestar, la integración en la Comunidad Europea y profundas transformaciones sociales. Posteriormente, José Luis Rodríguez Zapatero lideró el partido hacia una nueva victoria en 2004, desarrollando una agenda progresista centrada en la ampliación de derechos civiles y políticas de igualdad hasta su derrota en 2011 en plena crisis económica.
La etapa reciente del PSOE estuvo marcada por una profunda crisis interna que se inició con la dimisión de Zapatero y se agudizó con los malos resultados electorales
Alfredo Pérez Rubalcaba y posteriormente Pedro Sánchez, elegido secretario general en 2014, no lograron inicialmente revertir la tendencia descendente del partido. La situación alcanzó su punto más crítico en 2016, cuando el Comité Federal forzó la dimisión de Sánchez por su negativa a facilitar la investidura de Rajoy. La gestora presidida por Javier Fernández dirigió el partido durante ocho meses hasta que Sánchez protagonizó un retorno sin precedentes, ganando las primarias de 2017 con un programa de renovación y giro a la izquierda.
El momento decisivo llegó en junio de 2018, cuando Sánchez presentó una moción de censura contra Mariano Rajoy que prosperó con el apoyo de Podemos y los partidos nacionalistas
Con apenas 84 diputados, Sánchez se convirtió en presidente del Gobierno, iniciando una legislatura breve pero intensa que concluyó con la convocatoria de elecciones en 2019. Tras dos comicios consecutivos ese año, logró formar el primer gobierno de coalición de la democracia española junto a Unidas Podemos. La gestión de la pandemia de COVID-19, los fondos europeos de recuperación y la agenda de reformas sociales marcaron esta etapa, aunque también estuvo caracterizada por la polarización política y la dependencia parlamentaria de los socios de investidura.
Las elecciones del 23 de julio de 2023 supusieron un nuevo desafío para Sánchez, quien logró revalidar la presidencia pese a no ser la fuerza más votada
Con 121 escaños, dos menos que en los anteriores comicios, el PSOE articuló una compleja mayoría parlamentaria sumando a Sumar y obteniendo el apoyo de ERC, Junts, EH Bildu, PNV, BNG y Coalición Canaria. La investidura se logró tras intensas negociaciones que incluyeron compromisos controvertidos como la ley de amnistía para los encausados del procés catalán. Desde entonces, Sánchez lidera un gobierno que enfrenta constantes desafíos parlamentarios para sacar adelante su agenda legislativa, mientras gestiona los equilibrios entre sus diversos socios y afronta una oposición que cuestiona permanentemente la legitimidad de los acuerdos alcanzados.